(Aeronoticias).- Ahora que la tecnología nos permite ver películas 3D, si usted no es capaz de percibir esta tecnología o, incluso, presenta síntomas como dolor de cabeza, mareos o náuseas durante la proyección de la cinta, lo más probable es que, más allá del malestar inmediato, usted padezca de alguna patología ocular.
Según los especialistas, lo más adecuado es acudir al médico apenas se detecte alguno de estos síntomas. Cabe señalar que tres de cada diez personas no pueden apreciar plenamente estos efectos visuales.
El 5% de la población padece de visión monocular, lo cual le impide distinguir el efecto 3D (no lo ve simplemente), mientras que el 25% tiene visión binocular fronteriza, alteración que dificulta la observación del 3D (puede ver el efecto, pero de manera parcial o alterada).