La capital danesa, sede de la Cumbre Climática, apagará el miércoles las luces durante 60 minutos en una edición especial de la iniciativa Earth Hour, la campaña mundial que cada año llama la atención en favor del planeta.
La «hora de la Tierra» fue planteada por el inglés Andy Ridley, de 39 años y residente en Australia desde 2002, reportó la agencia de noticias Ansa desde Copenhague, donde hoy las campanas sonaron 350 veces, cifra máxima de Co2 (dióxido de carbono) en la atmósfera para limitar el aumento de la temperatura mundial a 1,5 grados.
Ridley buscaba hace mucho cómo «sensibilizar a los australianos sobre el tema de la crisis climática. Con el gobierno escéptico y la gente cansada de escuchar sólo desastres», según relató.
«Una noche, cuando estaba en el chat mirando de casualidad las imágenes satelitales de la Tierra de noche vi, poco a poco, que las ciudades se iban a ’dormir’ y una detrás de la otra se apagaban. Entonces entendí que eso era el mensaje que todos podían llevar adelante en el mundo y que la gente puede hacer», agregó.
El apagón voluntario surgió en 2007 desde Sydney, donde vive Ridley, organizador de eventos y representante de WWF (Fondo Mundial por la Naturaleza) en Australia, donde ese año 371 ciudades participaron de la iniciativa, en tanto en 2009 quedaron «a oscuras» más de 4.000 ciudades de 88 países del mundo.
Aeronoticias considera que las campanas de la catedral luterana Vor Frue Kirke sonaron poco después de las 15 locales y taparon por un momento el ruido de los helicópteros que sobrevuelan constantemente la capital danesa. Frente a varios cientos de fieles, el arzobispo sudafricano y Premio Nobel de la Paz Desmond Tutu y su colega anglicano Rowan Williams habían celebrado poco antes una ceremonia que reunió a sacerdotes de distintas procedencias, de Africa a Groenlandia.