(Aeronoticias).- Para el aeropuerto chiclayano José Quiñones, la proliferación de gallinazos en la zona amenaza al transporte aéreo debido a las perturbaciones que originan durante el ascenso y descenso de la aeronave. Sólo imagine el avión en pleno vuelo, un gallinazo ingresando a una de sus turbinas… y ya tiene el libreto de una película de terror.
Por ello, la Dirección General de Aeronáutica Civil organizó una reunión con sus grupos objetivo -alcaldes, gerentes, entre otros- para resolver esta situación. El tema será abordado por el Comité de Control de Fauna Silvestre.
La meta es eliminar 1400 gallinazos en los alrededores del aeropuerto de Chiclayo.