
El ex canciller trajo a recuerdo que en el año 1976 se produjo el llamado “Encuentro de Charaña” entre los presidentes Pinochet y Banzer, de Chile y Bolivia, respectivamente, pero no se concretó ningún acuerdo, época en la cual Perú presentó una contrapropuesta de modo que no altere el status de Arica, donde tiene legítimos derechos por haber sido parte de su territorio.
Chile es muy celoso en conservar sus territorios, aún de los que se apoderó tras la guerra de conquista que le permitió en 1879 arrebatar al Perú, Arica y Tarapacá y a Bolivia, Antofagasta, por donde precisamente tenían acceso soberano al mar los bolivianos que no cesan de reclamar siquiera parte de su recuperación en cuanto foro internacional se presenta.
Al respecto, se recuerda que una sonada negativa chilena para entregar una salida al mar a Bolivia se suscitó en un encuentro latinoamericano realizado en Monterrey, México, donde el entonces presidente boliviano Meza formuló el sempiterno reclamo de su país al gobernante chileno Ricardo Lagos, quién le replicó en forma destemplada: “Bien…ahora y aquí”. Lo único que le faltó fue quitarse el saco en un episodio que un analista internacional calificó como “un portazo” al pedido boliviano.
En otra ocasión, ya no un mandatario chileno si no un canciller, también chileno, contestó a su colega boliviano que abogaba por una salida al mar para su enclaustrado país: “Chile no regala ni vende“ sus ”territorios”.
Qué caramelo le ha dado Chile a Bolivia para que ilusione que al fin le dará acceso al Pacífico…?