(Aeronoticias).- Las vacaciones son el momento perfecto para compartir un viaje en familia pero en algunas ocasiones no son del todo relajadas. El primer escollo empieza en el mismo aeropuerto donde los retrasos en los vuelos, la pérdida de maletas o simplemente la espera puede hacer perder los nervios a más de uno. Por ello, flightright.es, portal para la gestión de los derechos de los pasajeros, y la agencia rumbo, han creado sendas listas con consejos para todos aquellos padres que desean un comienzo de vacaciones familiares sin perder los nervios. Estos son los esenciales.
1. UNA BUENA PLANIFICACIÓN
El primer paso para un buen comienzo de vacaciones es planificar bien el viaje. Esto supone llegar con suficiente tiempo de antelación al mostrador de facturación -aunque, si puedes, te aconsejamos que apuestes por la facturación online. De esta forma tendréis tiempo de sobra para pasar el control de seguridad y para llegar a la puerta de embarque correcta. Organizar dónde tienes que estar y a qué hora es importante, ya que permitirá a los niños tomarse un descanso entre trámite y trámite, y así asegurarte de que no vais a perder el vuelo. Sobre los billetes, hay que tener en cuenta que los niños menores de dos años pagan billete infantil, de precio reducido, sin derecho a asiento (van en brazos de sus padres). En algunos casos, las familias prefieren, especialmente en los vuelos largos, pagar el billete de avión completo. Por ejemplo, en el caso de Iberia, si no han cumplido los dos años y no ocupan asiento pagan el 10% de la tarifa. Entre dos y once años, viajan en tarifa completa sin resticciones, pagando un 50% menos en vuelos domésticos..
2. PEDIR LA «ASISTENCIA ESPECIAL»
Multitud de aeropuertos ofrecen servicios para familias que viajan con niños. Uno de ellos es la «Asistencia Especial», un servicio que se solicita en el momento de la reserva del vuelo y gracias al cual un empleado del aeropuerto se reúne con los pasajeros en el punto de facturación para ofrecer ayuda hasta el momento del despegue del avión. El poder disfrutar de este servicio dependerá de la disponibilidad del personal del aeropuerto, aunque cabe señalar que tendrán prioridad los padres que viajen sin acompañante y con más de un hijo.
3. COMPROBAR LAS RESTRICCIONES SOBRE EL EQUIPAJE DE MANO
Es una buena idea facturar el equipaje con antelación, pero lo que también tienes que tener en cuenta son las restricciones de equipaje de mano que estén vigentes en el momento de tu viaje. Estamos seguros de que no quieres que te paren en el mostrador de facturación por problemas con tu equipaje de mano, que podrían conllevar desde pagar un extra considerable hasta el grandísimo estrés que supone recolocar todo el equipaje o directamente tener que deshacerse de algunos objetos. Se mire por donde se mire, ésta no es una buena forma de comenzar las vacaciones.
4. ÁREAS DE RECREO Y GUARDERÍAS
No dudes en usar las áreas de recreo y guarderías que el aeropuerto tiene entre sus ofertas. Es una buena manera de tener controlados a los niños y al mismo tiempo una oportunidad para ellos de hacer nuevos amigos y jugar con ellos para que el tiempo se les pase, nunca mejor dicho, volando.
5. ELEGIR LOS ASIENTOS
Si viajas con familia numerosa, mejor no separarse de los niños en el avión, ya que esto solo conseguirá aumentar el estrés. Asegúrate de que reservas con antelación todos los asientos juntos y en una parte accesible del avión. También son preferibles las plazas situadas sobre las alas o junto a las ventanas, con vistas para distraer a los pequeños. Algunos aviones, en vuelos internacionales, ofrecen cunas portátiles para los bebés. Hay que solicitarla en el momento de la reserva.
6. DESPEGUE Y ATERRIZAJE
La diferencia de presion durante el despegue y el aterrizaje pueden causar dolor de oídos, obstrucción nasal y mareo. Para amortiguar estos malestares, es aconsejable tragar saliva o masticar algo. Para los bebés menores de 2 años puede servir de ayuda un biberón durante los despegues y aterrizajes, o darles un chupete, agua o zumos.
7. TECNOLOGÍA
Si tu imaginación no es suficiente como para entretener a los niños, ha llegado el momento de descargar aplicaciones móviles con las que mantenerlos ocupados. Estas apps -en móviles o tabletas- son la forma más cómoda y «compacta» de entretenimiento. Tampoco descarte llevar un portátil donde esté instalado su juego favorito o la película que no se cansa de ver. El tiempo pasará más rápido.
8. CONTROL DIGITAL DE TUS HIJOS
Los dispositivos de monitorización para niños son el complemento ideal si quieres localizar a tu hijo en medio de un aeropuerto abarrotado de gente. Así, los padres llevan un transmisor mientras que el niño lleva un brazalete. Cuando el rastreador considera que el niño ha excedido el rango de distancia delimitado, suena una alarma. Los padres también tienen la opción de pulsar un botón para activar un pitido en el brazalete del niño, lo que les ayudará a localizarles. Aunque desde luego, la alternativa más cómoda y barata es escribir tu número de móvil en la mano de tu hijo.
9. DEJAR QUE LOS NIÑOS MÁS MAYORES AYUDEN
Tener una familia numerosa no es sinónimo de un estrés mayor, sino de más manos para ayudar. Probablemente te darás cuenta de que muchos niños disfrutan jugando a papás y a mamás durante un rato. Todos deben tener en cuenta que los bebes y niños pequeños son más susceptibles de deshidratarse, por lo que deben beber agua o zumos antes y durante el vuelo, sobre todo en los de larga duración.
10. VIGILAR LOS PASAPORTES
Comenzar a dar ciertas responsabilidades a tus hijos es importante, pero a menos que quieras quedarte en tierra y tener que enfrentarte a gastos extra, te recomendamos que seas tú el que te encargues de los pasaportes de los niños. Solo por si acaso. En líneas generales, los menores de edad que viajan al extranjero deben llevar DNI, si se desplazan por la Unión Europea, y pasaporte a cualquier otro país. Hay algunas aerolíneas que establecen sus propias restricciones y requisitos, por lo que conviene tener claro qué documentación es necesaria para embarcar.
Fuente: Aviación al día.