El líder indigenista boliviano Evo Morales volvió a aplastar a la derecha de su país al ser reelegido como presidente con más del 60 por ciento de los votos de sus conciudadanos en las elecciones que se realizaron ayer, dejando en segundo lugar a su principal rival, Mandred Reyes, representante del modelo neo liberal, que apenas alcanzó un 26 por ciento de la masa electoral.
Morales atribuyó su indiscutible triunfo a “ haber aprendido a gobernar con subordinación al pueblo” .
Estos fueron los primeros comicios en que los bolivianos pudieron votar también fuera de las fronteras de su patria, como Argentina, Brasil, Estados Unidos, España y otros países del mundo, en un proceso que fue calificado por la OEA como “un ejemplo para América Latina”, tal como lo graficó Horacio Serpa, coordinar de este organismo y ex candidato a la presidencia de Colombia.
En Bolivia no rigió el llamado voto voluntario si no que cada ciudadano estaba obligado a votar so pena de una multa de 50 dólares más tres días de prisión.