La pareja norteamericana y sus tres hijos completaron su viaje en barco de siete años de duración, con tres vueltas al mundo, en la que vivieron casi aislados “por el bien de la familia”, según manifestaron, sin embargo no explicaron detalles y si se alimentaron de la pesca.
Hace unos años Tom planificó la travesía y recibió el apoyo de Jena, Laena y Ben, sus hijos, subieron a “Nueva Vida» y viajaron durante siete años, según el relato que hicieron al Washington Post y que publica la agencia Ansa.
Los niños perdieron amigos y no fueron a la escuela, «pero paciencia, saben leer y escribir, vieron y aprendieron cosas que de otro modo no hubieran conocido nunca. Son las personas más felices del mundo. Por mi, hubiera seguido viajando», dijo Tom.
La familia dio tres vueltas al mundo. Pasaron casi un año en un puerto de Nueva Zelanda, estuvieron en la Polinesia francesa, las Galápagos, las islas Salomón, Papúa y las Fiji.
Vivieron paseando, y cuando bajaban a tierra «tratábamos de vivir como la gente del lugar».
Ahora volvieron a Maryland. ¿Por qué? «Porque los chicos ya son grandes, están por comenzar su vida y deben conocer su país», explicó la madre.
Aeronoticias considera que 7 años en el mar deben constituir una experiencia inolvidable, quienes lo han logrado deberían escribir un libro, son una leyenda y una tradición, las familias que quieran imitarlas adelante.