Además, comprende verificar si alguna persona que llega al país en avión presenta síntomas de dolor de garganta, dificultad para respirar, fiebre o dolores musculares. De ocurrir algún caso será identificado en el propio aeropuerto Jorge Chávez y se les tomará una muestra, para practicarle los análisis confirmatorios correspondientes, comentó Caballero.
Añadió que si los visitantes no muestran mayores síntomas, se podrá ir a su hotel con una mascarilla y guardando las recomendaciones del caso, como el lavado de manos, limpiarse las secreciones con papel y desecharlas en una bolsa plástica para su eliminación.
Pero si, el turista muestra síntomas moderados o graves será derivado al Hospital Carrión donde se ha dispuesto un ambiente para su aislamiento.
El galeno también aclaró que en tanto no se presenten casos confirmados en el país, no es necesario que la población utilice mascarillas, como se viene haciendo en México y otros países.
Además, subrayó que consumir carne de cerdo peruano no representa riesgo de contraer fiebre porcina, por cuanto el Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa) realiza labores de vigilancia desde el 2006 y no se ha demostrado la presencia del H1N1 en los puercos autóctonos.
También comentó que los criadores de cerdos saben cuando el animal está enfermo, dado que muestran síntomas como: congestión ocular, secreción nasal, baja de apetito. En este caso el Ministerio de Agricultura cuenta con Senasa para la investigación de estos casos.
Por último recalcó que si los turistas o público en general sienten algún síntoma pueden llamar al teléfono de Infosalud que es el 0800-10828. Alto riesgo
Por su parte el viceministro de Salud Melitón Arce reconoció que las probabilidades de que se presente un caso de gripe porcina en el Perú son altas, tal como ocurre en cualquier país del mundo, debido al intenso tránsito aérero de personas.
Ante ello recomendó a los viajeros tomar en cuenta si han pasado los últimos días en lugares con alta incidencia del mal, como ciertas ciudades de México, pues ellos son quienes tienen las posibilidades más altas de contagio.
También pidió que en lo posible los ciudadanos eviten las aglomeraciones y eviten tocarse o besarse hasta que el peligro haya pasado.