DreamWorks Animation y Disney fueron los primeros en incluir cláusulas específicas en los contratos de los actores en las que se exige el compromiso de los firmantes a no divulgar las evoluciones de sus trabajos a través de las diferentes plataformas de comunicación que ofrece la red.
Aunque no fue confirmado por los estudios, algunos medios publican que Cameron Diaz y Mike Myers se comprometieron a silenciar su Twitter en referencia a la próxima secuela de la saga Shrek, a la que ponen las voces en la versión en inglés.
Según consignó el diario español El País, el furor de las redes sociales virtuales causó algunos disgustos a los ejecutivos de las cadenas de televisión estadounidenses.
Uno de los más conocidos fue el anuncio de la cantante Paula Abdul vía Twitter que dejaba de ser jurado del popular programa American Idol, un comentario con el que la artista impidió que los responsables de este espacio pudieran decidir cómo y cuándo dar la noticia.