(Aeronoticias).- Mitad dirigible, mitad avión, y mitad helicóptero. Así es como se describe el proyecto que ocupa hoy estas líneas, proyecto que promete ser toda una vuelta al tablero de ajedrez según los creadores, y que podría revolucionar toda la industria del transporte si se demuestra que es viable y posible.
Un vehículo espectacular
El nombre del proyecto es Airlander, una especie de combinación entre dirigible, helicóptero y avión que podría suponer todo un cambio de juego en la industria de los transportes, además de que podría llenar el cielo de aeronaves similares a los supuestamente extintos dirigibles que en el pasado se creía que iban a ser el futuro.
La aeronave, construida por Hybrid Air Vehicles Ltd, basa su diseño completamente en la aerodinámica y tecnología LTA (Lighter-Than-Air, más ligero que el aire) para conseguir sustentación, eso y llenarse de helio inerte. Sus dimensiones son de 92 metros de largo: 18 metros más que un Airbus A380 o un Boeing 747-8, y 9 metros más que el avión más grande construido hasta la fecha, el Antonov An-225. Esto lo convertiría en la aeronave más grande del mundo.
Tiene una autonomía de unas tres semanas, algo que haría virtualmente posible el llevar una carga útil de 50 toneladas a cualquier parte del mundo. Es completamente ecológico, puede ser tripulado con control remoto, e incluso puede convertirse en un colador y seguir en el aire: las balas no suponen un peligro para el, lo cual abre la posibilidad de usarlo en operaciones militares.
Es más, hablando de usos militares, al principio Airlander era un proyecto de los EEUU, pero se lo han llevado los británicos a sus tierras con la esperanza de venderlo a empresas mineras y petrolíferas que necesiten un medio para llevar equipamiento pesado a lugares inaccesibles, aunque también puede ser de utilidad en labores humanitarias. Lo que es seguro es que emprenderá su primer vuelo a finales de este año.
Fuente: www.omicrono.com
Foto: www.omicrono.com
