El presidente de facto hondureño, Roberto Micheletti, reiteró este lunes estar dispuesto a dar un paso al costado si el depuesto gobernante, Manuel Zelaya, también lo hace, para restaurar la paz en este país centroamericano. «Yo estoy en la mejor disposición de contribuir a la paz y la tranquilidad. Estoy dispuesto a negociar a transar lo mejor para Honduras», dijo en una entrevista a HRN.
Luego agregó: «Fui electo del 28 de junio al 27 de enero pero si la solución manda que yo me retire, aunque a muchos amigos no les gusta escuchar esto, sigo insistiendo que, por la paz, la tranquilidad y la armonía estoy dispuesto a cualquier cosa». «Pero también exijo que otros sectores que tomen en consideración esta situación y que hagan lo mismo, que dejen de estar ya intentando boicotear las próximas elecciones», subrayó.
Micheletti rechazó de plano en la mesa del diálogo una propuesta de un equipo negociador de Zelaya de restituir el mandatario en el poder, lo que también demanda la comunidad internacional a través de la Organización de Estados Americanos (OEA). Dijo entonces que estaría dipuesto a renunciar si también lo hacía Zelaya y se colocaba a un tercero en la presidencia, lo que es rechazado por el presidente depuesto.
Horas antes, el jefe de la misión de la Organización de Estados Americanos (OEA) en Honduras, el chileno John Biehl, afirmó que el acercamiento para un acuerdo final que solucione la crisis política en ese país centroamericano «está muy cercano», y probablemente ocurra esta semana. «El acercamiento para un acuerdo final está muy cercano. La voluntad de restituir el orden institucional en Honduras es clara», dijo Biehl desde Washington a la Radio Cooperativa de Santiago.
«Hay una coyuntura difícil pero creo que se va a llegar a un arreglo probablemente esta semana. Las cosas se han ido acercando muchísimo», aseguró.
