(Aeronoticias).- Fue el escritor norteamericano Ernest Hemingway,quien dio fama mundial a la caleta piurana Cabo Blanco con su libro “El viejo y el mar” en la década de los 50, convirtiéndola en un paraíso para la pesca de altura por la excepcional riqueza de sus aguas que atrajo después a millonarios personajes del cine y del deporte.
De eso hacen ya 57 años, y ahora los piuranos, con su presidente regional a la cabeza, se han puesto como objetivo devolver ese esplendor a Cabo Blanco con parte de los mil millones de soles que acaba de aprobar el gobierno de Ollanta Humala para un plan vial destinado a mejorar mil 500 kilómetros en la costa y sierra de este rico departamento norteño.
La rehabilitación de Cabo Blanco es uno de los frutos del II Congreso Internacional de Agencias de Viajes y Turismo que se realizó en Piura recientemente por APAVIT-PIURA con apoyo de PromPerú y del Gobierno Regional cuyo presidente recordó que fue en Cabo Blanco donde comenzó la pesca deportiva de altura en el mundo.
“Existen 22 mil hectáreas de zona costera que se están recuperando y que es necesario asfaltar para facilitar el acceso a este emporio del turismo”, dijo Atkins, remarcando al mismo tiempo que las aguas marinas que bañan Cabo Blanco contienen 80 por ciento de rica fauna marina.
Hemingway arribó a Piura por el aeropuerto deTalara en 1956 alojándose en el entonces exclusivo “Fishing Club” de Cabo Blanco en busca del merlin negro, pez de enormes kilajes. Posteriormente le seguirían luminarias del cine norteamericano como John Wayne, Paul Newman, James Stewart , Marylin Monroe y el astro mexicano Mario Moreno (Cantinflas).
“ Por qué no se puede repetir la historia…?” mencionó la operadora turística Marcela Hurtado Paredes, señalando que en Mèxico, por ejemplo, existe un lugar conocido como Los Cabos que da empleo a unas 200 mil personas e ingresos por más de 600 millones de dólares.
Nosotros le dijimos que en nuestro país funciona una empresa nacional que ha puesto sus ojos en Cabo Blanco con un proyecto para levantar un complejo turístico capaz de atender igual que lo eran los millonarios de los años 60. Se trata de Inkaterra y empezará sus trabajos el próximo año, conforme han anunciado.
