(Aeronoticias): A poco más de un año de que termine el presente sexenio, el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) presentó su Programa Institucional de Servicios Aeroportuarios de la Ciudad de México 2023-2024 (PISACM) que será el instrumento de planeación con el que se busca tener más seguridad, eficiencia operativa y sustentabilidad.
Además, una adecuada planeación, gestión, ejecución y evaluación de los recursos humanos, financieros y materiales, “cuyo fin último sea la satisfacción de los usuarios y pasajeros”, se lee en el documento que el AICM envió a la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria (Conamer) para su análisis y aprobación.
En el texto se señala que, con la cancelación del Aeropuerto de Texcoco, se determinó que el AICM continuara operando, por lo que fue necesario replantear su modelo de desarrollo para garantizar su viabilidad en el mediano plazo, con servicios sustentables y de calidad para los usuarios y pasajeros, así como una infraestructura moderna y eficiente.
“Aunado a la decisión de la anterior administración de sustituirlo por un nuevo aeropuerto, tuvo un fuerte impacto negativo, debido a que se detuvieron los programas de inversión, de modernización tecnológica y los procesos operativos y administrativos.
Aunque se contó con recursos para el mantenimiento de infraestructura aeroportuaria, en tanto entraba en operación el nuevo aeropuerto, no fue suficiente, lo que trajo un alto grado de obsolescencia y precariedad en todas las instalaciones, tanto las del lado aire como del lado tierra y creció exponencialmente el número de inconformidades relacionadas con la calidad del servicio ofrecido”, subraya.
En este sentido, se destaca que la inversión total de la anterior administración fue de 2,402 millones de pesos, mientras que de 2019 a 2022 se han invertido más de 4,300 millones de pesos, aunque en los dos últimos años el presupuesto ha sido mejor.
El PISACM considera que los programas instrumentados por la actual administración han permitido detener el deterioro, rehabilitar la infraestructura aeroportuaria e iniciar la modernización y actualización de los procesos, sistemas operativos y administrativos, pero no se ha logrado la mejora esperada del servicio debido al impacto causado por la emergencia sanitaria y por su condición de aeropuerto saturado.
Prevalecen problemas operativos, financieros, 10 normativos y tecnológicos que obstaculizan la plena recuperación y mejora de los servicios que ofrece.
“El deterioro de la infraestructura y la falta de sistemas incide invariablemente en los tiempos de espera, ya que algunas aeronaves deben permanecer en el área operacional durante un tiempo adicional al que emplean desde el aterrizaje hasta su llegada a posición, así como desde el embarque y hasta el despegue, lo que se vuelve crítico en las horas de mayor ocupación”, señala el documento.
Por lo que ante dicho escenario, entre las soluciones están: planear, gestionar y evaluar los programas de inversión y mantenimiento, supervisar el adecuado monitoreo, en tiempo real, de la operación aeroportuaria, así como sus procesos; coordinar las acciones con otras entidades aeroportuarias para optimizar el Centro de Mando Aeroportuario, coordinar con el Gobierno de la Ciudad de México las acciones para que los proyectos de inversión y la rehabilitación de la Terminal 2 se lleven a cabo en tiempo y forma.
Asimismo, actualizar y, en su caso sistematizar, los procedimientos operativos y comerciales, de acuerdo con las necesidades actuales, consolidar los nuevos sistemas implementados para la operación y control, supervisar la implementación del Sistema de Seguridad Operacional, revisar los contratos de servicios aeroportuarios, complementarios y comerciales, y adecuarlos conforme a la normatividad, entre otros.
“El Programa Institucional propone soluciones para atender, en el corto plazo los principales problemas del AICM, fortaleciendo la planeación y evaluación, optimizando el control de procesos e instrumentando mejoras que permitan brindar un buen servicio y la satisfacción de los usuarios”, se destaca en el documento.
Hacia 2024, con las acciones que se plantean en las dos terminales, se habrán de resolver sus problemas más críticos, se contarán con áreas de documentación con suficiente capacidad para procesar a los pasajeros, la revisión en los filtros de seguridad se volverá más ágil, la estancia en las salas de espera y de preabordaje mejorarán de la mano de la puntualidad de los vuelos, y el estado de los sanitarios mejorará de manera importante.
“Al término de los siguientes 20 años, el AICM, se consolidará como un recinto de servicio de excelencia, manteniendo los niveles de confort que requiere un aeropuerto de estas características”, se lee en el programa.
De acuerdo con el documento, el AICM es el principal aeropuerto del país con una gran influencia en los ámbitos económico, político y socio-cultural. En 2021, ocupó el lugar número 17 a nivel internacional, entre cerca de mil aeropuertos en cuanto a movimiento de pasajeros y en el sitio 49 respecto a las toneladas de carga movilizada, de acuerdo con Indicadores del Consejo Internacional de Aeropuertos.
En el ámbito regional, era el principal puerto aéreo en Latinoamérica por la cantidad de personas atendidas y el segundo por el volumen de carga.
Fuente: A21mx