(Aeronoticias).-Tras la denuncia de una supuesta agresión contra los trabajadores de la aerolínea LAN y efectivos policiales que custodiaban el aeropuerto de la ciudad de Arequipa, tal y como informaron diversos medios de comunicación, el ministro de Trabajo, José Villena afirmó que solo se trató de un malentendido.
En declaraciones a la prensa, Villena aseguró que en ningún momento hubo un entredicho con el personal de la aerolínea, y afirmó que ya todo está solucionado. “Yo regrese a Lima, tranquilo en un avión como debe de ser pagando mi pasaje, todo como debe ser”, enfatizó.
Lamentó que se haya creado toda una historia que llegó a la opinión y al Congreso a través de la prensa, y que él incluso recién se enteró al día siguiente de que presuntamente ocurrieron los hechos.
“Le pido mil disculpas a toda la prensa y a la población, porque en verdad no ha pasado nada de las cosas que están diciendo allí”, afirmó el titular de Trabajo.
Agregó además que no se le ha informado de que se haya realizado alguna denuncia en su contra por este hecho en la comisaria del lugar presuntamente interpuesta por una trabajadora de LAN, quien afirma que la agredió físicamente.
“Yo lo que puedo decir es que ha sido un malentendido, y si hay un procedimiento no se adelanten en el tema y esperemos el conducto regular si es que hay algo, pero en realidad no hay nada”, precisó.
“Este es un malentendido que han generado de una cosa que no ha pasado, que haya un papel o una denuncia como están diciendo personalmente no lo sé pero en todo caso no adelantemos toda una leyenda contra mí”, agregó.
Cabe recordar que según informes de seguridad del aeropuerto de Arequipa, el titular de Trabajo agredió física y verbalmente a los trabajadores de la aerolínea LAN y efectivos policiales que custodiaban el terminal.
Según los informes que enviaron los jefes de seguridad Marco Antonio Zegarra y Javier Rojas a la administradora del aeropuerto Angela Delgado Zegarra, se le informó al ministro Villena que la aeronave se encontraba con las puertas cerradas, pero que éste respondió que no le importaba y que si no lo dejaban entrar iba romper los vidrios.
