(Aeronoticias) La industria aeroespacial estadounidense se despertó el miércoles, al igual que otros sectores, ante la perspectiva de una impredecible presidencia de Donald Trump y su impacto en las oportunidades de negocio futuras, especialmente de la unidad de aviones comerciales del fabricante aeronáutico líder Boeing, un negocio que depende fundamentalmente de las ventas en el extranjero y de un orden internacional orientado hacia el libre comercio.
Analistas del sector señalan que la retórica anti-tratados de comercio y proteccionista de Trump durante la campaña electoral ha plantado una preocupación real en torno a que las políticas de la nueva administración pudieran llegar a detener la expansión de la industria aérea global, en momentos en que hay incertidumbre por el entorno de mercado y cuando las ventas de algunos programas de Boeing no pasan por su mejor momento y requiere de algunos clientes clave, especialmente en Asia.
Trump se expresó específicamente en sus discursos contra el acuerdo del gobierno de Obama con Irán, sobre el cual cuelga una gran orden de aviones de fuselaje ancho de Boeing, y contra el Ex-Im Bank (Banco de Exportación-Importación), el cual apoya el financiamiento de muchas ventas de aviones comerciales del fabricante de flota en el extranjero.
En una entrevista con Bloomberg News a principios de agosto, Trump describió el Ex-Im Bank, al que se oponen los Republicanos del Tea Party, como «una especie de ropa de cama de plumas» para unas pocas empresas que pueden hacerlo perfectamente sin financiamiento gubernamental. «Así que no me gusta», dijo Trump. «Creo que es innecesario. … Realmente no es una empresa libre. Yo estaría en contra. Melcher dijo que AIA continuará trabajando para obtener los votos en el Congreso para autorizar plenamente a Ex-Im y que Trump «tendrá que trabajar con el Congreso».
Asimismo, el ahora presidente electo Trump reservó gran parte de su más feroz crítica para el comercio con China, que compra un tercio de todos los 737 que Boeing construye en Renton (planta donde fabrica los modelos Next Generation y el MAX que incluye los 737-700, 737-800 y 737-900ER), además de un número creciente de aviones de fuselaje ancho, a medida que sus aerolíneas están extendiendo sus redes en el largo radio.
Contención por ahora
La mañana después de las elecciones, sin embargo, los líderes de la industria aeroespacial se esforzaron para ser positivos sobre el riesgo al comercio futuro.
«Trataremos de trabajar con el equipo de Trump para convencerlo de que tener oportunidades comerciales es esencial para nuestras industrias estadounidenses, como la industria de aviones comerciales», dijo Dave Melcher, director ejecutivo del grupo de lobby de la Asociación de Industrias Aeroespaciales (AIA), que representa a los mayores fabricantes aeronáuticos y empresas de defensa de los Estados Unidos, así como a sus proveedores.
«Y si vamos a hacer negocios comerciales, bien, hagámoslos tan competitivos como sea posible para el beneficio de las industrias y los empleos de los Estados Unidos. Pero no los condenen, porque dependemos de ellos para tener acceso a los mercados donde queremos vender».
Melcher ha agregado que «Donald Trump es en primer lugar un hombre de negocios. Si tiene la mentalidad de un empresario acerca de esto, buscará maneras de ayudar a la industria de los Estados Unidos a tener éxito».
Boeing se ha mantenido conservador en sus primeros comentarios sobre el resultado de las elecciones, simplemente felicitando al presidente electo y diciendo que trabajaría con él «para asegurar que las compañías estadounidenses puedan competir, ganar y hacer crecer nuestra economía para proporcionar buenos empleos a los trabajadores estadounidenses; así como preservar el liderazgo estadounidense en la seguridad nacional», dos temas muy mencionados por Trump.
Fuente: http://www.hosteltur.com/118942_trump-podria-afectar-expansion-ventas-boeing.html