En el estudio se determinó que los niños obesos tenían signos de un marcador inflamatorio que predice las futuras enfermedades del corazón.
El 40 por ciento de los niños del estudio de tenían niveles elevados de la proteína C reactiva (PCR), comparado con 17% de los niños con peso normal, afirma el estudio publicado en Pediatrics, la revista de la Asociación Estadounidense de Pediatría.
La protenía C reactiva se encuentra en la sangre y si los niveles de ésta son altos es un indicio de inflamación en el organismo.
Debido a que el daño que se ve en la enfermedad coronaria es causado por la inflamación en las paredes arteriales, la PCR puede ser utilizada como un marcador general del riesgo de desarrollar ese trastorno y futuros adultos con riesgos de ataques al corazón.