La cantante permanece hospitalizada desde el día de ayer y se dice que está en terapia intensiva por intoxicación. Anteriormente la cantante estuvo en una clínica para superar su adicción al alcohol.
El fin de semana pasado Alejandra Guzmán ofreció un concierto en la ciudad de Houston y algunos medios aseguraron que estaba alcoholizada.
Desde el comienzo de su concierto se mostró desorientada, se equivocaba en las letras de sus canciones y en un par de ocasiones se cayó en pleno escenario.
En todo momento, la intérprete de Rosas rojas batalló para caminar, no podía coordinar sus pasos de baile y constantemente se sostenía de sus músicos y de objetos a su alrededor.
Otros rumores señalan a que el estado de la cantante es grave y que está en el área de terapia intensiva, por lo que su madre, Silvia Pinal acudirá hoy a visitarla.
Esta información surge a raíz de una serie de escándalos recientes.
El primer día del 2010, la rockera protagonizó una discusión a abordo de un avión que obligó al piloto a aterrizar tan sólo unos minutos después de haber despegado. El hecho se registró cuando la cantante viajaba desde la capital mexicana hacia la ciudad de Huatulco.
Una mujer quiso tomarle unas fotografías a la cantante, lo que detonó el enfrentamiento físico y verbal. Algunos de los pasajeros aseguraron que la hija de Enrique Guzmán estaba alcoholizada y muy cariñosa con un hombre.
Cabe recordar, que en octubre del año 2009 la rockera fue internada de urgencia tras una lesión en la espalda baja que casi la mata, consecuencia de un tratamiento estético mal aplicado.
Además, en el año 2008 estuvo en una clínica de rehabilitación: “No tenía conciencia y me vendía la idea de que era parte de ser rockera. Tuve que aprender a estar bien por mi hija Frida, por mi público y por mí” dijo en esa oportunidad.