
Según la fuente, Pyongyang ha pedido a la elite política y militar del régimen de la dinastía comunista norcoreana, que guarde lealtad al heredero, hecho que puede ser tomado como una clara prueba de que ha pasado a formar parte de la línea sucesoria de Kim Jong-il
Además, pese a que el Gobierno surcoreano no ha confirmado la autenticidad del informe del su agencia de espionaje, ya en febrero, el jefe de la inteligencia surcoreana, Won Sei-hoon, apuntaba la posibilidad de este nombramiento.
El anuncio se produce poco después que Corea del Norte realizase su segundo ensayo nuclear el pasado 25 de mayo y tras el lanzamiento de un cohete de largo alcance en abril, lo que ha elevado la tensión en la región y en las relaciones internacionales.
El medio estatal Radio Pyongyang calificó el ensayo de un "evento histórico", que demostró al mundo la dignidad y la política "Sungun", o de prioridad militar, iniciada por Kim Jong-il.