(Aeronoticias).- Para esconderse de unas mortíferas moscas, los grillos de dos islas de Hawái no sólo no «cantan», sino que ya no son capaces de hacerlo. Hace diez años, con dos años de diferencia, aparecieron en las islas Kauai y Oahu machos con alas alteradas.
Normalmente, los grillos frotan sus alas para producir el sonido característico que atrae a las hembras. Pero las investigaciones muestran cambios en las alas silenciosas que surgen de mutaciones separadas en cada isla, según publica la revista especializada «Current Biology».
Esto hace que los grillos mudos de Hawái sean un nuevo ejemplo de «evolución convergente». Sus enemigas, las moscas parasitarias, tienen la habilidad de localizar a los grillos por el sonido.
Tras encontrar a su víctima –un grillo macho que «canta» para atraer una hembra– la mosca rocía con sus larvas al insecto. Estas se meten en su cuerpo, se alimentan y emergen una semana después dejando atrás sólo la cáscara del infortunado grillo.
Con información de El Comercio.