Cuando creíamos que la catástrofe ya lo había logrado todo, y el dolor y la desesperación se apoderaban de todo un pueblo devastado por el terremoto de 7.1 grados en la escala de Richter que habría cobrado la vida de más de 200 000 personas, un nuevo terremoto de 6.1 grados sacudió Puerto Príncipe, terminando por destruir gran parte de la infraestructura, e impidiendo las labores de demolición.
Aeronoticias considera que la solidaridad del mundo se llama Haití, y que esta furia de la naturaleza se ensaña con uno de los países más pobres del mundo, lo que nos debe llevar a pensar en un plan Marshall para la reconstrucción de Haití, a fin de que en cinco años este pueblo, azotado por el destino pueda emerger valeroso de las profundidades de tanta desgracia.
