Enrique Cornejo, Ministro de Transportes, no toma decisiones en la Dirección General de Aeronáutica Civil del Perú y viene convalidando al cuarteto de funcionarios, tres de ellos del Departamento de Seguridad y Mercancías Peligrosas y otro que llegó a tener el rango de Sub Director, que ejecutaron ordenes del ex Viceministro de Transportes cuestionado, Carlos Miguel Puga Pomareda, perjudicando a ciertos operadores aéreos para hacerlos salir del mercado y lo que originó que los afectados les interpusieran denuncias penales en Nazca y en el Callao, contra estos “angelitos de la DGAC”.
Lo grave es que se habrían utilizado recursos públicos del Estado, para contratar abogados externos por montos muy altos y sin licitación pública, para la defensa de estos funcionarios.
Que espera el Ministro de Transportes del Perú para demostrarle a la opinión pública y al país que su política sectorial, respetará la inversión privada y los puestos de trabajo de las familias peruanas, que dependen de estas empresas de aviación que sufrieron un duro embate en la gestión anterior de Verónica Zavala, la considerada por los sectores especializados, como la peor y más ineficiente Ministra de Transportes y Comunicaciones, que tuvo el Perú en su historia, ya que de su Despacho se dieron las órdenes que ejecutaron funcionarios públicos de la DGAC del Perú, a los que hoy el Ministro Cornejo les continúa renovando sus contratos y que originaron hambre para muchas familias peruanas, que perdieron su puesto de trabajo.
