El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó este lunes que su país tiene el desafío de convertirse en la quinta economía mundial en 2016, año de los Juegos Olímpicos en Rio de Janeiro, como proyecta un estudio del Banco Mundial (Bird). En su programa semanal de radio «Café con el Presidente», Da Silva se dijo convencido de que Brasil está en el camino correcto debido al crecimiento de la economía, la industria y el comercio.
«Es un desafío que está puesto para nosotros. Entonces, precisamos hacer las cosas ciertas, no tenemos que hacer ninguna invención, ninguna magia», subrayó. Según él, entre las medidas necesarias están aumentar el crédito y reducir impuestos para incentivar al consumidor brasileño a comprar lo que no tiene.
«Lo que Brasil necesita es tener varios años de crecimiento consecutivo para que podamos generar más empleos, para que podamos tener más renta, aumentar lo que ganan los trabajadores, porque ahí la sociedad va a tener más poder de consumo, las empresas van a producir más y vamos a generar más empleos», señaló.
Esa dinámica, enfatizó el mandatario, es como una «rueda gigante»que no puede parar nunca. «Ella tiene que continuar girando para que podamos recuperar el atraso a que Brasil fue sometido en las décadas en que no consiguió desarrollarse», afirmó.
Aeronoticias considera que Da Silva se mostró «muy satisfecho» con la estadística oficial de una reducción del desempleo a 7,7 por ciento en septiembre, el mismo nivel anterior a la crisis financiera internacional, y previó que los números mejorarán más en los próximos meses.