El hecho se habría suscitado luego de que despegara del aeropuerto Ejecutivo de Fort Lauderdale, a unos tres kilómetros -dos millas- de la terminal aéreo, la aeronave partió la casa en dos para luego quedar totalmente incinerada.
Según afirma la vocera de la policía local de Fort Lauderdale, Dani Moschella, un transeúnte habría presenciado la caída y habría sido él, la persona que dio aviso a las autoridades, según el mismo afirma, vio que la avioneta comenzaba a descender y alertó a las autoridades. Se desconoce si había o no personas en la casa, al momento de la colisión de la aeronave, y de la persona de la aeronave, no se aseguraba que habría sobrevivido.
Además Kathleen Bergen, de la Administración Federal de Aviación, sostuvo que la aeronave se dirigía a Fernadina Beach, una zona costera en los suburbios de Jacksonville, donde debería haber aterrizado alrededor de la 1:00 de la tarde
Según registros de la Administración Federal de Aviación, el dueño de la aeronave es Sebring Air Charter, una empresa que se dedica a hacer vuelos charter –expresos- de Tamarac, un suburbio de Fort Lauderdale.
