(Aeronoticias): La industria de la aviación está preocupada por el decreto que se presentará en cualquier momento para reducir las operaciones en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) de 52 a 43 por hora.
El Gobierno Federal, a través de la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC) y Servicios a la Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano (Seneam) asegura que el objetivo es lograr un nivel óptimo en el flujo de pasajeros que utilizan la terminal; de lo contrario, la saturación en las áreas de estancia y accesos de embarque y desembarque presentarán cada vez más dificultades, retrasos y molestias a los usuarios. Cabe mencionar que el Gobierno Federal no ha actualizado las instalaciones ni ha asignado un presupuesto para que el aeropuerto mantenga condiciones de operación adecuadas.
Sin embargo, hace menos de un año ya se había hecho una primera reducción de slots en el AICM con la justificación de darle mantenimiento a distintas partes del área de maniobra, y pasar 61 a 52 operaciones por hora, y este segundo recorte pasará de 52 a 43 operaciones por hora.
La administración del aeropuerto afirma que la propia normatividad explícita que la capacidad de operación se determina a través del análisis de movimiento de los aviones y por el número máximo de pasajeros que pueden ser atendidos por hora en la terminal y bajo estándares recomendados de pasajeros por metro cuadrado.
Según los parámetros analizados, el AICM no cumple con una relación aérea/pasajero mínima que establece la legislación en materia de Protección Civil. No obstante se reconoce que la terminal aérea no está obligada a respetar esta normativa por ser un edificio federal, pero sirve de referencia en la materia al no existir parámetros de aforo máximo.
Sin embargo previo al 2008 el aeropuerto manejó un parámetro de 440 mil operaciones por año, sin menoscabo de la seguridad dentro de las instalaciones y esta cifra es muy superior a lo que se tiene actualmente.
En el Programa Maestro de Desarrollo 2022-2026 (PMD), se previó que para 2026 se alcanzaría la cifra de 48 millones de pasajeros; sin embargo esa cifra se alcanzaría ya para el presente año.
Las autoridades esperaban atender un promedio diario de 178,500 pasajeros en el periodo de octubre de 2022 al 25 de marzo de 2023, con la primera reducción de slots; sin embargo, la estimación se incrementó a un promedio diario de 180,900 pasajeros, “por lo que las acciones tomadas fueron ineficientes”. En opinión de Maria Larriva el rediseño del espacio aéreo ha afectado la eficiencia de todo el sistema de aeropuertos ya que tiene errores importantes en su diseño que no han sido corregidos.
El papel de OPSCENTER
Aunado a otras acciones para garantizar los estándares de calidad y seguridad operacional óptima en el AICM, se constituyó el OPSCENTER en el Centro de Mando Aeroportuario, con el objetivo de que no salga ninguna aeronave que no tenga asignado un slot. Sin embargo, se sabe que los vuelos de las Secretaria de la Defensa, de la Fuerza Aérea de la Guardia Nacional y la Marina no están incluidos en el conteo de slots y por lo tanto las operaciones del gobierno incrementan de forma importante la cantidad de operaciones que tiene el aeropuerto.
Con las acciones del OPSCENTER se prevé que para la próxima temporada de invierno 2023 se atenderá a un promedio diario ligeramente menor a los 161,400 pasajeros, esto sin considerar los slots que deberán ser devueltos, con la correspondiente cantidad de asientos.
No obstante, en la resolución por la que se declaró la saturación de los edificios terminales del AICM el pasado marzo de 2022, se argumentaba que en los últimos 10 años la composición de la flota aérea de las aerolíneas que operan en el AICM cambió, al incorporar a su flota aeronaves de fuselaje medio a ancho, al pasar de constituir el 65% a un 89%.
Esto, aseguraron, incrementó significativamente el número de pasajeros en las terminales del AICM, lo cual repercutió en la eficiencia y calidad en el servicio, toda vez que, entre 2014 y 2019, el AICM registró un crecimiento de 47% en el número de pasajeros atendidos, al pasar de 34 a 50.3 millones.
Sin embargo, en el reciente estudio de capacidad para el periodo marzo 2023-junio 2023, se afirma que el 89.05% de la flota que opera en el AICM son aeronaves medianas, y el 9.08% son aviones pesados, y el restante 1.87% son ligeros.
Adicionalmente, se puntualizó que para mitigar las condiciones de saturación en la Terminal 1 del AICM (T1) se cancelaron todos los contratos de arrendamiento para Aeroméxico, por lo que a partir de septiembre ya no recibirá ninguna asignación de posiciones en esta terminal, cancelando las posiciones 1, 8 y 20, mismas que serán trasladadas a la terminal 2 (T2).
Uno de los estudios en los que se basa la resolución de reducir más slots, estipula que la saturación de usuarios en la T1 produce una creciente probabilidad de afectación a la integridad física de los usuarios en caso de ocurrir una emergencia, dificultando así la correcta aplicación de los protocolos establecidos de seguridad y protección civil del aeropuerto, así como para proteger las instalaciones, bienes, entorno e información, ante fenómenos perturbadores.
“Cabe mencionar que es evidente la ineficiencia que la administración del aeropuerto tiene en cuanto a los servicios que debe ofrecer, que son aduana, migración, control de equipaje y procedimientos de seguridad los cuales son sumamente lentos”, afirmó María Larriva.
No hay sustento
En entrevista para A21, María Larriva Sahd, especialista en espacio aéreo, afirmó que esta decisión es totalmente unilateral y desafortunada para la industria aviación mexicana, pues va a traer más problemas que soluciones. “Tradicionalmente este tipo de medidas se discuten con los usuarios y se llegan a acuerdos en lugar de imposiciones que pueden ser más perjudiciales que benéficas”.
Aseguró que esta decisión de una segunda reducción de slots es una necedad de querer que la aviación se mueva a fuerza a Santa Lucía, igual que se hizo el decreto de sacar la carga de este mismo aeropuerto.
Para la especialista, el mayor problema que puede representar esta decisión de una nueva reducción de slots es que las aerolíneas ya han vendido parte de los vuelos que tendrían que eliminarse, sobre todo para la temporada de invierno próxima.
“Por cierto los organismo gubernamentales de turismo resultarán muy afectados porque ellos ya están promoviendo la temporada alta de invierno
De aplicarse este decreto, en el último año se habrán reducido en un 33% las operaciones respecto a inicios de 2022.
“¿Cómo van a justificar las aerolíneas con sus clientes que ya pagaron los boletos de avión?, y ¿cómo van justificar las decisiones de esta última notificación? y aunque se justifiquen los pasajeros se van a quejar con justa razón, y va a haber penalizaciones para las aerolíneas, no para el aeropuerto. Así el siguiente paso para las empresas es el proceso de inconformarse legalmente y posiblemente conseguir un amparo legal ante esta decisión”, dijo
Explicó que esta decisión unilateral, carece de todo sustento, y de paso se está destruyendo la aviación como la tenemos ahora.
“¿Qué va a pasar?, se va a reducir el mercado, pero al haber demanda porque la situación económica del país genera la demanda, lo que va a suceder es que vamos a tener boletos muy escasos y muy caros”.
Larriva Sahd aseguró que los estudios realizados para determinar la capacidad del aeropuerto requieren de una empresa especializada que efectúe este tipo de estudios y tenga el equipo adecuado y AFAC no tiene personal calificado para supervisar este trabajo.
Añadió que la autoridad lleva más de un año diciendo que van a a volver a hacer el rediseño del espacio aéreo, “porque están conscientes de que fue mal hecho y que está perjudicando la seguridad de la aviación y el volumen de operaciones, o sea, está siendo ineficiente y no han hecho nada”.
Adicionalmente sabemos que la autoridad aeronáutica está degradada y por ello estamos en Categoría 2, por lo que no tienen el personal capacitado para estudios aeroportuarios y tendrían que recurrir a empresas autorizadas para esta función como Mitre para realmente acceder a una información que tenga seriedad.
María Larriva aseguró que entre las acciones que el aeropuerto puede realizar para agilizar los servicios y procesos es aplicar nueva tecnología, “ya sea para migración, aduanas y filtros de seguridad, ahí hay que invertir, pero si no tienen presupuesto, ¿cómo lo harán?. Hace unos meses la jefa de Gobierno anunció que el gobierno de la ciudad abonaría un presupuesto de 500 mdp para corregir todas estas deficiencias.
“Esto es un capricho, es un intento más de tratar de llenar Santa Lucía con aviones, Pero el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) no tiene las condiciones técnicas, ni las capacidades, ni la infraestructura para recibir todo el tráfico que quieren sacar del AICM”, concluyó la experta.
Fuente: A21.com.mx
