(Aeronoticias): Claudia Celestes, Aviación Digital, Sp.- La agencia espacial más destacada del mundo, la NASA, ha anunciado con entusiasmo, la revelación pública del avión experimental X-59, programada para el 12 de enero de 2024, a las 4 pm (22:00 horas en la península). Este evento histórico, integrado en la ambiciosa misión Questt de la NASA, marcará el comienzo de una nueva era en la aviación supersónica.
En una ceremonia especial organizada por el principal contratista, Lockheed Martin Skunk Works, el X-59 será presentado al mundo en Palmdale, California. Este momento único será transmitido a nivel mundial a través del servicio de transmisión NASA+, la aplicación de la NASA, el canal YouTube o en el sitio web oficial de la NASA.
La aeronave de investigación supersónica silenciosa X-59 de la NASA es el resultado de décadas de investigación aeronáutica y vuelo supersónico. Diseñado para operar a velocidades supersónicas sin el estruendo característico, el X-59 busca transformar ese sonido en un «golpe» sónico más discreto.
El X-59, pieza central de la misión Questt de la NASA, busca cambiar la percepción del público sobre el vuelo supersónico, proporcionando datos a reguladores para reconsiderar la prohibición actual de vuelos comerciales supersónicos sobre tierra. Este avance promete reducir los tiempos de vuelo a nivel nacional e internacional.
Desafíos Técnicos y Progreso Continuo
El X-59, un avión experimental revolucionario, ha enfrentado diversos desafíos técnicos que han retrasado su fecha de vuelo prevista inicialmente para 2023. Los ingenieros de la NASA y Lockheed Martin Skunk Works han trabajado arduamente para integrar plenamente los sistemas de la aeronave y abordar problemas con los ordenadores de seguridad.
A lo largo del último año, el equipo de Questt ha realizado avances significativos, completando la estructura de la cola del X-59 y llevándolo desde las instalaciones de ensamblaje a la línea de vuelo para pruebas estructurales cruciales.
Desmitificando la prohibición de vuelos supersónicos
La NASA, en estrecha colaboración con socios gubernamentales, industriales y académicos, se encuentra inmersa en una incansable labor destinada a superar desafíos fundamentales, entre ellos la restricción de vuelos supersónicos civiles sobre tierra, vigente desde 1973. La propuesta innovadora de implementar una nueva regla basada en el sonido, en lugar de la velocidad, emerge como un elemento crucial para lograr la aceptación pública de los vuelos supersónicos, marcando así un hito trascendental en la evolución de la aviación moderna.
El levantamiento de esta histórica restricción se erige como el primer paso esencial para permitir que los avances tecnológicos y las soluciones propuestas por la NASA y sus colaboradores tengan un impacto tangible en el panorama de la aviación supersónica.
Consciente de la necesidad de una transformación integral en la percepción y regulación de la aviación supersónica, la agencia espacial estadounidense no solo aborda los desafíos técnicos, sino que también se embarca en iniciativas que buscan mitigar las preocupaciones medioambientales y de bienestar público asociadas con estos avances revolucionarios. La visión de la NASA va más allá de la superación de obstáculos técnicos; se centra en forjar un futuro donde los vuelos supersónicos sean no solo posibles, sino también sostenibles y aceptados a nivel global.
Desmitificar la prohibición de vuelos supersónicos es un objetivo primordial. Esta restricción, impuesta en 1973 debido a la inquietud generada por los estallidos sónicos y su impacto en la percepción pública, ahora está en la mira de la NASA para una revisión significativa. La propuesta de una nueva regla basada en el sonido representa un enfoque más holístico y contemporáneo, alineado con los avances tecnológicos y las cambiantes expectativas de la sociedad.
El X-59, con su diseño innovador y capacidad para realizar vuelos supersónicos sin generar molestos estallidos sónicos, se presenta como un testimonio tangible de la posibilidad de cambiar la percepción pública y el futuro de vuelos comerciales supersónicos. Este avión experimental encarna la visión audaz de una industria aeroespacial que no solo aspira a romper barreras, sino también a establecer nuevos estándares para la movilidad aérea global.
Participación del público y tarjeta de embarque
Además, los entusiastas del público, tendrán la oportunidad de registrarse para obtener una tarjeta de embarque virtual para el primer vuelo del X-59 mediante la experiencia Flight Log de la NASA. Este enfoque innovador permite la digitalización de nombres en el dispositivo de almacenamiento del piloto y proporciona una tarjeta de embarque imprimible, creando una conexión única entre la audiencia y esta hazaña tecnológica.
La revelación del X-59 no solo marca un hito en la historia de la aviación sino que también allana el camino hacia un futuro de vuelos comerciales más rápidos y eficientes.
Fuente: aviaciondigital.com