(Aeronoticias).-Ante la amenaza inminente de un lanzamiento norcoreano de un misil que se encargaría de poner en órbita un satélite, El gobierno de Japón desplegó dos unidades de sistemas de misiles tierra-aire con la finalidad de interceptar el proyectil en el caso de que su trayectoria ponga en riesgo su seguridad.
Por su parte el régimen comunista calificaba como una declaratoría de guerra cualquier intento de echar abajo sus supuestas pretensiones espaciales.
Cabe precisar que el régimen de Pyongyang enfatizó sobre la naturaleza científica y pacífica del lanzamiento, e incluso señaló que de efectuarse la interceptación del mencionado satélite implicaría una gran catástrofe.
Estados Unidos instó a China a presionar a su aliado norcoreano para que abandone sus pretensiones, el cual ha sido denunciado por Corea del Sur y Japón como una seudo prueba de un misil balístico nuclear de gran alcance.